Liberar-se

Un beso puede ser una hermosa manera de liberar un poco de ese amor que todos llevamos dentro, ¿Cuantas maneras de encontrar la propia libertad deben de existir...? Pero al hablar de libertad me refiero a esa íntima y personal en la que nada ni nadie puede interferir, esa que nos permite hacer, pero sobre todo sentir, esa libertad sin límites, que ni siquiera el respeto por la libertad de los demás puede  menoscabar, me gustaría descubrirla, ser capaz de encontrarla de perderme en ella, de dejarla pasar como un fluido, como la sangre que nos recorre por dentro, roja de pasión, sin ningún coágulo entrometido en su libre circulación, como instrumento de vida.

El autor nos muestra un beso "El beso"  esa pintura refleja solo un beso, pero nuestro pensamiento, nuestra mirada puede conseguir que ese beso continue hasta el infinito en otra boca, solo por la acción de nuestro deseo, convertir sus colores en sensualidad, dejarnos llevar sin resistirnos a la realidad de nuestro pensamiento, gritar "tocados" pero sin permitir que nadie nos hunda.

¿Es el pensamiento ese único instrumento de libertad? Pensaba que sucedería si expresáramos libremente todo lo que nos pasa por la cabeza... y si no lo hacemos de alguna manera ¿No estamos renunciando a una parte de eso que somos ? O quizás estemos privando a los demás de disfrutarnos o de padecernos... Me quedo en las preguntas, porque en este momento no atino a abrirme a las respuestas.

Brisa Urbana

Imagen: Klim