Marcando el ritmo

No recuerdo la hora, ni mis expectativas respecto a la vivencia de aquel paraje natural que se preveía único. Sencillamente estaba allí de píe, atenta, esperando que algo nuevo sucediera y ocurrió. Como cuando me detengo y simplemente espero a que llegue un pensamiento, un instante de luz. Luego un minuto sucede a otro y olvidando cualquier pretensión, la magia más sublime se apodera de mí, me toca el corazón, me abro al instante.

 

Mi alma empieza a vibrar, soy capaz de mirarme a los ojos sin necesidad de un espejo y me reconozco. El universo soy yo, mientras otros universos me acompañan, como las notas musicales acompañan la letra de una canción y todo es perfecto.

 

Una dulce melodía empieza a avanzar entre el furor del ruido imperante, no importa el espacio, ni el tiempo, solo la emoción que empieza a nacer lentamente. No soy esa emoción, pero la reconozco y me balanceo suavemente entre sus brazos, danzando al ritmo que me marca, hasta que como una estrella fugaz desaparece y da paso a otro instante de luz.

 

Brisa Urbana

Imagen: ?? Gracias.