Aquellas pequeñas cosas
Se hace camino al andar.
Estos días para no perderme me he propuesto, conservar los sonidos del silencio en mi corazón, para ser capaz de sentir el aleteo de esa mariposa que vuela en lo más íntimo de mi ser, acariciándome con suavidad hasta hacerme sentir cosquillas en el alma y en el estómago.
Soy consciente de que su aleteo, según la teoría del caos, puede estar produciendo un efecto incontrolable al otro lado de mi vida, pero en estos momentos soy incapaz de hacer otra cosa que sentirlo hasta convertirme en su movimiento, sin importarme nada más que la sensación de sentir y amar lo que siento.
Como me gusta improvisar las pequeñas cosas y me gusta sentir que mi vida se compone de muchas de esas pequeñas cosas, he decidido centrarme en la actitud que tengo hacía cada hecho que voy creando en mi vida, pero sobre todo en los que aun no se como los estoy creando, cual es mi parte de responsabilidad en que sucedan y más allá de todo eso, en aquellos que siguen el curso de la naturaleza y que lo único que puedo hacer es acompañarlos y agradecer el aprendizaje que soy capaz de obtener.
Así luego cuando finalice el año, al recordar aquellas pequeñas cosas, sienta que ha merecido la pena el camino recorrido. El final una vez más es el principio de algo, que ese algo sea amor si es posible, porque nada vale más que un instante de amor.
Vuela...
Brisa Urbana
Imagen: ¿..?